Por Susana Frisancho
He mencionado en mi blog el trabajo de Bandura sobre los mecanismos de desconexión moral (por ejemplo, puede leerse algo sobre su propuesta en este ensayo sobre Derechos Humanos y Educación). Aunque Bandura tiene un enfoque muy funcionalista que nunca me ha atraído del todo (si lo comparo con la aproximación estructural piagetana o la sociohistórica de Vigotsky que me resultan mucho más estimulantes), y es más conocido por sus teorías sobre el aprendizaje por observación, la autoeficacia o el determinismo recíproco que por sus reflexiones sobre la moral, esta vez quiero presentarles su teoría acerca de la desconexión moral, la que da luces sobre los mecanismos cognitivos que las personas podrían estar utilizando como defensa para desconectarse de sus conductas inhumanas o inmorales, para no hacer aquello que deben hacer, y para no experimentar en este proceso culpa ni remordimiento.